Mi Tarea para el 2002

Diciembre 31 del 2001

Texto: 2 Corintios 13:5-7

Introducción:

Doy gracias a Dios que termina un año que a mí se me hà hecho

interminable.  Quizá otros han sentido que se há pasado de una

forma rápida y velóz, pero para mi nó.

 

Decía el día de ayer que yo catalogaba el 2001 como el peor

año de mi vida en el cristianismo, dejé de hacer muchas cosas

que fueron parte de mí, dejé de hacer cosas importantes las

cuales me llevaron hasta a donde ahora estoy.

 

Y hoy en ésta noche, empiezo a hacer mi tarea antes de que sea

muy tarde, cualuquier retraso, cualquier descuido intencional

podría ser el fin de muchas cosas que hé querido hacer.

 

Voy a hacer religiosamente mi tarea, voy a ponerle más atención

hasta a los más mínimos detalles.

 

1.- Examinaos a vosotros mismos...                 2 Cor. 13:5

 

Voy a examinarme diariamente, voy a pedirle a Dios

que me dé ojos para ver mis propios errores antes que los

errores de los demás.

 

2.- Voy a portrarme varonilmete ante... 1 Cor. 16:13

 

Voy a enfrentar con valor cualquier consecuencia de los

errores que hé cometido, voy a pedirle a Dios me dé la

hombría necesaria para no buscar culpables, sino que a-


cepte mis desaciertos y pagar el precio que sea necesario.

 

3.- Voy a ser un buen compañero de batalla...        Gál. 6:1

 

Si alguno fuere sorprendido o sorprendida en alguna “falta”

no dice cuál es la falta, pero cualquier que fuese, voy a por-

tarme como un buen compañero en la batalla, cuando alguno

fuere herido, le voy a levantar, le voy a restaurar, aunque

yo no sea levantado... cuando a mí me toque caer!!!

 

 

4.- No voy permitir el perder una amistad...   Fil. 4:2

Rom. 12:18

Aunque haya sido yo el ofendido, aunque me tilden de

tonto, aunque haya sido muy pero muy grave la ofensa,

voy a aprender a pasar por alto, por grave que sea.

 

Proverbios 19:11

 

 

5.- Mostraré tanto interés por los perdidos como por aquellos

     que por una u otra razón ya no caminan con Cristo.

 

Santiago 5:19-20

 

Mi meta há sido siempre ésta y no la cambiaré, que vengan

a Jesús, aunque no se congreguen con nosotros.

 

Conclusión:

2 Pedro1:3-10