Sermón # 881

Domingo 3 de Marzo del 2013 – am.

Por Rev. Carlos Navarro – Pastor

 

Título:  “Fiesta y Funeral”

Texto:  Daniel 5:1-5

 

Introducción:

     A ninguno de nosotros nos podría pasar por la mente que en una fiesta tan especial y singular en nuestras vidas nos toque pasar de un extremo a otro.  Ni el hombre más negativo se prepararía para lo peor, su mente, sus esfuerzos, su energía, sus recursos, sus deseos y sus gustos TODOS se enfocan en un momento de celebración.

 

     Esa noche que el rey Belsasar esperaba todo menos la muerte.  Era un banquete ofrecido a sus más allegados, a sus aliados, a sus amigos; era una noche de gala que termina no solo en tragedia sino que en su propia muerte.  Era una noche de júbilo pero termina en desgracia; era una noche de brindis pero termina con la vida de la persona más imporntante del imperi babilónico.

 

     Al rey Belsasar se le olvidaron algunos detalles sencillos de la vida:

 

-          Dios es el Rey y no él

-          Así como el banquete tiene una hora de inicio, también tiene una hora para terminar.

-          Dios ve todo… y no permite que nadie se burle de El ni de los utensilios que han sido consagrados para El.

-          Que a Dios no se le puede desafiar y quedar impune

 

-          El autor Juan Lawrence cuenta la siguiente historia de la ciudad de Mesina, Italia. Esta ciudad tenía muchos pobladores incrédulos y maléficos. El 25 de diciembre de 1908, fecha en la que se celebra el nacimiento de nuestro Salvador, un periódico publicó una parodia, burlándose de Dios y desafiándolo a mostrar su poder enviando un terremoto a la ciudad.

-          Tres días después Mesina se encontró al centro del terremoto más devastador de la historia europea. Se calcula que unas 100.000 personas perecieron en este terremoto en Mesina y las ciudades circundantes.

-          ¿Será solamente una coincidencia? ¿Será por casualidad que el desastre tuvo lugar tan pronto después del desafío? Sólo podemos decir que, si fue coincidencia, fue una coincidencia muy grande.

1.- Se preocupó por los invitados:                Daniel 5:1

·        Eran un total de mil de sus invitados, todos príncipes.

·        Eran un grupo seleccionado para formar parte de esa gran celebración

·        Era el escenario perfecto para lucirse

·        Era el escenario perfecto para mostrar sus gustos y poderío.

2.- Se preocupó por el menú:                     Daniel 5:2-3

·        Seguro que ha de haber sido el mejor vino

·        El brindis lo hizo en presencia en muestra de generosidad hipócrita

·        En un banquete de los reyes no faltan las mejores comidas

·        Estuvo atento a que todos participasen de esa gran celebración

3.- Ignoró que Dios no puede ser burlado: Daniel 5:5-6

·        La lectura en la pared, un escrito con dedicatoria al rey irrevertente

·        Los utensilios de su celebración le pertenecían a Dios

·        Daniel 5:22-28

·        Mene – Mene = Dios le ha puesto fín a tu reino, se terminó!

·        Tekel = Dios te ha pesado en su balanza divina y te falta en tu peso. Su majestad no pesa lo que dice pesar.

·        Uparsín = Dios ha roto tu reino y se lo ha dado a tus enemigos.

 

La Fiesta llegó a su fin inesperado,

El festejado terminó siendo velado

El festejado terminó siendo llorado

 

 

Alguna lección que Dios podría darnos a cada uno de nosotros!