Sermón # 1058
Domingo
5 de Octubre del 2014 – am.
Por Rev. Carlos Navarro – Pastor
Título:  “Cuando Dios ve a la Iglesia”  Parte III
Texto:  1ª. Pedro 2:9-10
Introducción:
     Cerramos con éste sermón la serie de 3 en
cuales hemos querido aprender y demostrar de la forma que Dios nos ve a
nosotros que somos Su Iglesia.
     Vimos
en los dos sermones anteriores que para Dios somos:
1-     Su familia y nos ve como
tal
2-     Su Instrumento para
alcanzar al mundo
3-     Un grupo de redimidos
4-     Un grupo de consagrados y
apartados para El
5-     Las manos de Jesús
6-     Los oídos de Jesús
7-     El corazón de Jesús
     Si Dios ve a la Iglesia con esos ojos,
nosotros que somos Su Iglesia no podemos vernos de una manera diferente.
A través de éstos domingos pasados vimos lo que Cristo como cabeza y
jefe de la iglesia desea que nosotros hagamos para El y para Su Reino.
Hoy Finalizamos viendo, analizando y comprendiendo los privilegios que
tenemos como hijos suyos.
Hoy
finalizamos dimensionando la cantidad de privilegios pero también de
responsabilidades.
1.- Somos Linaje Escogido:               
1ª. Pedro2:9a
Ascendencia o descendencia de una familia
Clase ó condición familiar, Raza.
Ø    
Si algún día habíamos querido llevar un buen nombre?
Ø    
Cuando
Cristo nos compró nos dió ese honor de no ser cualquiera.
Ø    
Fuimos
seleccionados entre miles de millones para recibir un privilegio especial.
Ø    
No
somos cualquier cosa!!!
2.-
Somos Real Sacerdocio:                       1ª. Pedro 2:9b
Ø    
Somos
un pueblo de Intercesores
Ø    
Somos
un pueblo de Intermediarios
Ø    
Somos
un pueblo de ministros de Dios
3.-
Somos una Nación Santa:                     1ª. Pedro 2:9c
Ø    
Somos
un pueblo diferente
Ø    
Somos
un pueblo apartado para Dios
Ø    
Somos
un pueblo con exclusividades
Ø    
Somos
un pueblo llenos de privilegios celestiales
4.- Somos
Adquiridos por Dios:           1ª. Perdo 2:9d
Ø    
Hemos
sido adquiridos por Dios
Ø    
El
propietario es quien le da el valor al producto
Ø    
No
somos cualquier cosa
Ø    
No
le pertenecemos a cualquier persona
Ø    
Somos
pertenencia exclusiva de Dios
Así nos ve Dios!
Así debemos vernos nosotros!
Aunque los demás nos vean de
otra forma y piense de nosotros lo opuesto.