“Cristiano por un día”

Predicado el domingo 4 de Marzo del 2001 am.

 

Texto: Hechos 17:10-12

 

Introducción:

 

Se cuenta de un jóven que había llenado una solicitud

de empleo en una compañía de mucho prestigio a nivel

internacional.  Su apariencia física era impecable y cau-

saba una muy buena impresión a donde él iba.

 

Preparó un Curriculum de una forma excelente, puso

a su pastor, al profesor de escuela dominical y a un

diácono de la iglesia como referencias.  El Jefe de per-

sonal revisó la aplicación y se la pasó al gerente quien

personalmente tomó mas minutos de lo necesario para

leerla con mucha atención.

 

Hizo llamar al aplicante y le dice: Agradezco las recomen-

daciones de sus amigos de iglesia y de su Pastor, pero lo

por la seriedad de el empleo que le ofrezco, me gustaría

escuchar la opinión de aquellos que lo conocen de lunes

a sábado y no solamente el domingo.


En el texto que hemos leído, observamos que la Iglesia de

Berea se componía de personas que perseveraban en lectura

de la Palabra de Dios todos los días, ese fué su patrón a seguir,

allí encontraron los preceptos y el ejemplo a seguir.

Muchos ultimamente nos hemos llegado a creer que somos

buenos cristianos, simplemente porque:

 

- Hemos dejado de tomar (A.A.)

- Hemos dejado de fumar (Nicoret)

- Hemos dejado de bailar

- Hemos dejado de vacilar, estamos tranquilos...

 

Pero qué de las malas palabras?

Pero qué del mal trato en casa?

Pero qué de la deshonestidad en el trabajo?

Pero qué de las picardías en nuestros tratos?

 

Alguien dijo que HIPOCRITA es aquel que no es EL

los domingos!!!

 

Actuamos de una forma diferente en la Iglesia a la forma que nos comportamos afuera de la Iglesia.

 

Observemos la conducta de 2 grandes hombres de la Biblia, que no alteraron su forma de vivir o de actuar por que el momento les obligaba a hacerlo o porque las cirscunstancias lo aorillaron a conducirse de una forma difrerente.  Su comportamiento fué siempre el mismo.


José:       Génesis 39:1-6

  39:20-23

La conducta de José era un modelo ideal, tanto en su relación con Dios, como con sus semejantes.

 

Su conducta diaria era coherente con sus principios y valores

espirituales.

 

Daniel:    Daniel 6:4 y 10

Un cristiano de todos los días es aquel que en momentos de apremio, de presión, de adeversidad o de prosperidad no pierde nunca su manera correcta de vivir.

 

Jesucristo nuestro más grande ejemplo nos enseña que no necesariamente porque estoy rodeado de las personas equivocadas debo de conducirme como ellos actúan.  Jesús comió y se relacionó con personas de todas las clases sociales pero jamás cambió su estilo de vida.

 

Si queremos impactar nuestro mundo tenemos que actuar tal y como lo que somos pero no solamente por un día a la semana.

 

No se pueden vender nuestros principios de acuerdo a la ocación, no podemos ser camaleónicos.